El escaneo de iris crece en Chaco: el negocio de 2024 que no tiene regulación
En 2024, el escaneo de iris se convirtió en una tendencia en auge en varias provincias argentinas, y Chaco no ha sido la excepción. Esta nueva modalidad promete grandes sumas de dinero a cambio de los datos biométricos de las personas, generando preocupación tanto entre la ciudadanía como entre las autoridades locales.
A través de plataformas como Facebook, en los últimos meses se multiplicaron las publicaciones que ofrecen hasta 30.000 pesos a quienes se sometan a un escaneo de iris. Con la promesa de "dinero fácil", muchas personas en Chaco han optado por participar en este procedimiento, que, en su mayoría, se realiza en la ciudad de Buenos Aires, aunque las empresas organizan traslados para quienes residen fuera de la capital. Esta actividad no solo ha ganado terreno en Resistencia, sino también en otras localidades de la provincia como Presidencia Roque Sáenz Peña y General San Martín.
Sin embargo, este fenómeno ha despertado la alarma de las autoridades. El Comisario Inspector Rolando Sosa, jefe del Departamento de Investigaciones de la Policía de Chaco, expresó su preocupación ante la falta de regulación sobre el uso de datos biométricos en el país. "Nuestro objetivo es saber qué hacen con los datos que extraen de ese iris", señaló Sosa, quien destacó que el vacío normativo en torno a la protección de datos personales dificulta la intervención judicial.
Posibles delitos y redes de estafa
La investigación en curso, que abarca varias provincias, ha puesto de manifiesto los riesgos asociados con el escaneo de iris. Según el comisario Sosa, existen sospechas de que los datos recopilados podrían ser utilizados para cometer delitos relacionados con el robo de identidad o vendidos a terceros para fines ilegales. A lo largo del año, se han producido varios allanamientos en Chaco, especialmente en Resistencia, aunque las sanciones se han visto limitadas por la falta de legislación clara sobre el manejo de los datos biométricos.
Casos registrados en Chaco
La Policía de Chaco ha registrado al menos cuatro incidentes vinculados con el escaneo de iris. El primero de estos ocurrió en mayo, cuando varias personas de Resistencia fueron trasladadas a Buenos Aires para someterse al procedimiento, bajo la promesa de un pago de 30.000 pesos. El operativo de la Policía, que incluyó la intervención de un colectivo de turismo, permitió detectar la modalidad. Posteriormente, se entrevistó a uno de los organizadores, quien admitió que le habían contratado para transportar a los interesados desde Chaco hasta la capital.
Días después, un caso similar se repitió con un micro de la empresa "El Cometa", que trasladó a 60 personas desde Chaco a Buenos Aires para realizar el escaneo. En ambos incidentes, las personas involucradas afirmaron conocer la actividad a la que se dirigían y confirmaron que recibirían el pago prometido.
A nivel nacional, las autoridades también están investigando a las empresas vinculadas con este tipo de prácticas. En localidades como Sáenz Peña, se clausuraron eventos destinados al escaneo de iris, mientras que en General San Martín, un salón de eventos fue cerrado en noviembre tras la intervención de la Policía. En este último caso, se registró a un hombre de 28 años, originario de Escobar, como encargado de la operación.
A pesar de la controversia y los riesgos asociados con esta modalidad, el escaneo de iris continúa ganando popularidad en Argentina, y especialmente en Chaco. Las autoridades locales y nacionales siguen trabajando en la investigación de las redes implicadas en esta práctica, aunque la falta de un marco normativo adecuado sigue siendo uno de los principales obstáculos para la implementación de medidas legales efectivas.
Con más de 2,2 millones de argentinos registrados en plataformas que realizan el escaneo de iris, Argentina se posiciona como el principal mercado de este tipo de servicios a nivel mundial. En este contexto, se hace urgente una legislación que regule el uso de datos biométricos y brinde garantías sobre la privacidad y seguridad de los ciudadanos.