El arzobispo que organizó la "Misa por la Paz" dijo que "metió la pata" y pidió perdón
Un inesperado momento se vivió este sábado en la misa para repudiar el ataque contra Cristina Kirchner, llevada adelante en la Basílica Nuestra Señora de Luján, cuando el arzobispo encargado de dirigir el encuentro, Jorge Scheinig, interrumpió la ceremonia para disculparse con sus colegas.
Fue casi al final cuando pidió hacer un paréntesis para trasmitir un mensaje en el marco de una jornada "por la paz" en la que estuvieron presentes Alberto Fernández y varios representantes del Frente de Todos, aunque sin asistencia opositora.
"Quisiera hacer una aclaración. Este fin de semana los obispos de la Argentina invitamos a todo el país a rezar por la paz y no pensamos en una misa ni en un evento central. Pero cuando el intendente de Luján me propuso hacer esta misa le dije que sí. Pero fue creciendo la embergadura de la misa y yo quiero pedir disculpas", dijo intentando explicar a sus colegas el contexto en el que surgió.
Y añadió: "De verdad, lo quiero hacer de corazón, porque tal vez yo no invité...por no querer hacer algo tan importante me equivoqué, metí la pata, como decimos. Me equivoqué, quiero pedir perdón, de verdad. Porque así fue, fue rápido y a veces estas cosas nos superan", dijo, dejando en claro que fue una iniciativa casi espontánea.
En este sentido, según consignó Clarín, remarcó el interés y la predisposición de la Iglesia para calmar la tensión social.
"Por otro lado, ustedes saben que todas las iglesias siempre estamos dispuestas a dar una mano a la fraternidad, a la paz, el Papa insiste tanto en la cultura del encuentro... eso es lo nuestro, porque el Señor nos enseñó eso: hay que juntarnos, tiene que haber fraternidad, así lo hizo Jesús", exclamó.
Volviendo a su discurso habitual, el arzobispo finalizó: "La Iglesia siempre está dispuesta a dar una mano para la fraternidad, para la escucha, para el diálogo, para la paz social, para el fortalecimiento de la democracia. Entonces, gracias por esta misa, de corazón. Por haber celebrado juntos esta misa y que el Señor y la Virgen nos regalen este camino de paz y de fraternidad", concluyó Schenig.