Cabandié responsabilizó a los productores agropecuarios por los incendios en el Delta del Paraná
El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, apuntó hoy contra los productores agropecuarios por el fuego en el Delta del Paraná, al asegurar que "la avaricia del sector productivo" es una de las principales causas que desencadenaron la emergencia ambiental en la región del Litoral.
El funcionario sobrevoló ayer la zona afectada por los distintos focos ígneos y recorrió la base operativa de San Pedro, en la provincia de Buenos Aires, donde se emplaza el Comando de Operaciones de Emergencias (COE). En su diagnóstico sobre los incendios, dijo que "hay varias cuestiones" que desembocan en la quema de tierras, y que "principalmente está atravesada por factores climáticos, pero también por factores productivos".
Al igual que en otros incendios forestales, Cabandié atribuyó el aumento de la temperatura global, que "subió en comparación con 10,15, 20 o 30 años atrás". Además, mencionó que "no hay que descartar otros factores que inciden como la sequía y la bajante de la cuenca hídrica del Paraná", que se encuentra en descenso hace tres años consecutivos.
Además, el ministro fue enfatizó en la culpa del modelo productivo y al tipo de actividad agropecuaria por los incendios: "Lo que sucede es la avaricia del sector productivo. En vez de esperar a que se renueven naturalmente las pasturas o conformarse con la superficie de pastoreo para el ganado, queman pajonales y pasturas para renovarlas antes de las lluvias de primavera. Esto es lo que estamos viviendo hoy".
"Esta es la razón principal. Hay algo vinculado también a proyectos inmobiliarios, quemar para preparar la tierra y un cambio de suelo con futuro de proyectos inmobiliarios, pero el 90% es quema de pajonales para extender la superficie de pastura del ganado", indicó.
Según Cabandié, este tipo de comportamientos económicos se remonta al "año 1994, cuando Argentina toma el modelo sojero y empieza a capitalizar cada vez más el monocultivo", mientras que en las provincias de Entre Ríos, Buenos Aires y Santa Fe, "la soja expulsó al ganado del continente a las islas del Delta del Paraná". "Estamos hablando de dos millones de hectáreas, principalmente de Entre Ríos", detalló.
El ministro reconoció que "estamos muy lejos de discutir el modelo productivo que es dañino por varias cuestiones", pero puntualizó en los "culpables" de los focos ígneos. "Hay 100 o menos delincuentes que están perjudicando a 5 millones de personas. Si queremos analizar esta problemática desde la perspectiva ambiental, haganló, pero esto es un tema productivo", finalizó.