Con sólo 22 años, se retiró la nadadora argentina Delfina Pignatiello
La nadadora argentina Delfina Pignatiello anunció su retiro de la natación con tan sólo 22 años. "En mi corazón quedará para siempre el orgullo, la alegría y el honor de haber representado nuestra celeste y blanca estos años con tanta pasión", expresó la atleta a través de sus redes sociales.
Pignatiello saltó a la fama en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires en 2018, cuando escribió "Abuela" en su mano minutos antes de recibir una de las dos medallas que ganó ese año.
Su alto perfil continuó hasta los J.J.O.O de Tokio el año pasado, pero luego, tras llegar de la competencia, decidió dejar de utilizar sus redes sociales. "Me encantaría seguir haciendo streams y seguir con el canal de YouTube, pero estoy en una situación que me sobrepasa", expresó en ese momento y explicó que era para cuidar su salud mental.
Poco más de un año después la nadadora argentina anunció que no competirá más, de todas maneras, dejó a al deporte nacional: tres medallas en el Campeonato Mundial Junior de 2017, dos medallas en los Juegos Olímpicos de la Juventud de Buenos Aires 2018, tres medallas doradas en los Juegos Panamericanos de 2019 y los récords absolutos argentinos en 200, 400, 800 y 1500 metros libres (estos últimos son, también, latinoamericanos).
El comunicado completo
En mi corazón quedará para siempre el orgullo, la alegría y el honor de haber representado nuestra celeste y blanca estos años con tanta pasión. Ahora quisiera contarles que hace unos meses tome la decisión de hacer un paso al costado del alto rendimiento y la competencia. El deporte forma parte de mi vida desde otro lado, sigo nadando y estar en el agua seguirá siendo siempre mi lugar en el mundo. Me compré una cámara de fotos y emprendí un camino artístico el cual estoy explorando con mucha curiosidad, ganas de aprender y seguir creciendo. Me hace muy feliz y me hizo soñar devuelta.
Gracias a quienes me acompañaron hasta aquí y quienes elijan seguir haciéndolo.
Siempre los alenté a perseguir sus sueños. Hoy agrego: ¡anímense también a patear tableros y arrancar un nuevo juego! Elijan siempre su camino de corazón, con amor, valentía y dedicación. Ojalá se conviertan en el niño que siempre quisieron ser.
